Este domingo por la mañana se registró un asesinato en calles del municipio de Ecatepec, Estado de México. Los implicados no pertenecían a ningún grupo delictivo, ni tampoco se trató de un ajuste de cuentas, sino de una discusión familiar en torno a la violencia doméstica.
Una mujer identificada como Ana, que sufría el constante maltrato de su marido, le llamó a sus hermanos tras recibir una fuerte golpiza de su parte para que la auxiliaran. Sin pensarlo dos veces acudieron hasta su casa, ubicada en la colonia Granjas Valle de Guadalupe para rescatarla y hacerle frente al violento cuñado.
Al llegar llamaron a la puerta con fuerza, pero no contaron con que saldría el esposo y uno de sus hermanos armado. Sin pensarlo dos veces disparó contra Omar, hermano de Ana, quien murió en el lugar. A pasar de que otra hermana trató de cubrirlo, no pudo hacerlo y a consecuencia terminó herida en el hombro.
La madre de Ana le llora a su hijo y pide venganza
Tras recibir la amarga noticia, la madre de Omar llegó al lugar para ver el cuerpo inerte de su hijo tendido en el asfalto. De inmediato corrió hasta él para llorarle y pedirle a Dios que lo bendiga al tiempo que le cubrió el rostro con una cobija.
"¡Cobardes, malditos!", dijo la mujer llorando su pérdida. Fue justo en esos instantes donde su dolor la obligó a pedir justicia: "Saquen a esos perros. Maten a esos perros". A pesar de que le aclararon que ya no había nadie en la casa, ella insistía en ver caer a los asesinos de Omar.
Un hombre que conocía a la víctima y lo acompañó relató los hechos a las personas que se situaron al rededor del hombre. También entre lágrimas aseguró que ya no pudo hacer nada por su amigo, pues él estaba "checando" desde otro punto la escena, pero no contaba conque el cuñado saldría acompañado y armado.
"No pude hacer nada. Hijo de su p@## madre", citó el joven embargado por la tristeza.
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