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En una escena como de película, Yordan Apostolov, jugador del PFC Balkan Botevgrad, quería hacer tiempo y se le ocurrió tirarse de la camilla cuando era trasladado hacia afuera de la cancha en los últimos instantes del partido.
Cuando le ganaban 2-1 al Belasitsa Petrich en el minuto 93, ingresaron los operarios de la camilla para sacar al jugador, quien les indicaba hacia donde tenían que ir. Instantes después se dio vuelta para caer sobre el césped ante la mirada sorpresiva de un camillero.
Apostolov dio varios giros y después se llevó la mano a la cabeza, mirando hacia afuera de la cancha.
En el momento que se volvió a subir a la camilla, una de las personas casi le cae encima de sus pies, sustituyéndolo otro.
Finalmente, el Balkan ganó el partido y ocasionó que subieran un puesto en la clasificación general por la lucha por el título de la tercera división del futbol búlgaro.
