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Es bien sabido que el deporte preferido del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, es el béisbol. De hecho, la tarde de este 4 de enero, en su cuenta oficial de Twitter, difundió un video donde se le observa realizando ejercicios de dicho deporte. Sin embargo, el suceso aconteció apenas unas horas después de que se observara al funcionario Hugo López-Gatell vacacionando en Puerto Vallarta en medio de la emergencia sanitaria.
“Para todo hay tiempo, además uno tiene que dedicarle tiempo al deporte. Todo lo que es el ejercicio físico es fundamental, es medicina preventiva”, aseguró el mandatario.
Luego de realizar algunos lanzamientos con la bola, López Obrador se concentra en explicar a detalle algunos de los conceptos básicos del béisbol. Además, afirma la importancia de encontrar tiempo para realizar actividad física, pues “así nos ponemos fuertes y resistimos las enfermedades y las pandemias”. La escena de esparcimiento protagonizada por el presidente no es extraña aún en plena pandemia por COVID-19, incluso se ha replicado en esferas ajenas al deporte.
La recreación en medio de la emergencia sanitaria, la cual ha dejado más de 1 millón de casos acumulados y 100 mil muertes confirmadas en México, ha sido una de las conductas mayormente castigadas y cuestionadas por la opinión pública. Después de casi 10 meses de cumplir con la encarecida recomendación de “quedarse en casa” para reducir la cadena de contagios, y con la llegada de las vacaciones de fin de año, miles de personas han aprovechado la ocasión para romper el confinamiento y asistir a centros turísticos.
Durante el fin de semana, Hugo López-Gatell Ramírez, el funcionario al frente de la implementación de medidas y rendición de cuentas sobre el estado de la pandemia en el país, fue visto en las playas de Zipolite, en el estado de Oaxaca. De inmediato, los usuarios encargados de difundir las imágenes del subsecretario sin cubrebocas y sentado en una mesa frente al mar cuestionaron la congruencia de las indicaciones emitidas para hacer frente a la pandemia.
A diferencia del video del presidente, donde a pesar de realizar actividad física se le observa a gran distancia de sus acompañantes, en las imágenes del viaje de López-Gatell no se observa el acatamiento de las medidas de seguridad sanitaria. En la primera de las imágenes difundidas a través de redes sociales, se le observa a bordo de un avión, y con el cubrebocas colocado por debajo de su cara, mientras sostiene una llamada telefónica.
Luego de algunas horas, en otra imagen, el subsecretario se mostró sentado en una mesa acompañado de otras personas. Aunque tampoco portaba cubrebocas, la escena se caracterizó por estar al aire libre. Incluso hubo quienes aseguraron que el lugar al cual asistió se encontraba en un proceso de apertura escalonada con el aforo permitido al 30%.
El avance de la pandemia en el país ha representado un gran reto por salvaguardar la salud, así como dilemas para la supervivencia económica de la sociedad civil. Por un lado, el creciente número de casos en el número de contagios y hospitalizaciones ha obligado a las autoridades estatales ha colocar a sus entidades en el color rojo del semáforo de riesgo epidemiológico. Por otro lado, las medidas pertinentes han vuelto necesario el cierre de miles de negocios cuyo ingreso representa el sostén económico de familias.
Además, las escenas protagonizadas por el mandatario y el subsecretario de salud, representan la situación de millones de personas que, tras haber vivido 69 días de confinamiento y atravesar por el 219 de la nueva normalidad, buscan alternativas para resarcir los efectos del aislamiento social. Sin embargo, el comportamiento de los líderes y figuras públicas del país funge como un mensaje significativo para que los efectos de la pandemia puedan ser superados con mayor rapidez.
Hasta el 3 de enero de 2021, las autoridades sanitarias contabilizaron 1,448,755 casos positivos acumulados y 127,213 personas fallecidas a causa del contagio del nuevo coronavirus.
